El sindicato de trabajadores del Hospital Universitario de Caracas. Informó sobre la suspensión de sueldos y salarios, así como también los despidos injustificados del personal sanitario y obrero.
Hace unos meses, una trabajadora jubilada del Hospital recibió una propuesta para trabajar como instrumentista en quirófano bajo la modalidad de contratada. Con el paso de los días y ejerciendo de nuevo en ese centro de salud, se contagió de COVID-19. Como necesitaba reposo, los departamentos de Enfermería y Relaciones Laborales le notificaron que estaba suspendida y que, aparentemente, cuando se mejorara la iban a volver a contratar.
El sector salud, al igual que el educativo, ha denunciado una política que consideran “anticonstitucional”. La cual, hace referencia a lo que alega la patronal como “cambio de modalidad de pago”, que consiste en la suspensión de sueldos.
Pablo Zambrano, secretario ejecutivo de Fetrasalud, explicó que esto se ha aplicado en casos de trabajadores que se contagian de COVID-19, personas de la tercera edad con patologías complejas y mujeres embarazadas que requieren reposos o personas que califican para la jubilación y son egresados.
Denis Guédez, representante sindical del HUC, explicó que en distintas reuniones se encargaron de organizar todos los casos de trabajadores con permisos por enfermedades. No obstante, un total de 46 trabajadores del Hospital Universitario de Caracas recibieron una notificación de despido el pasado 26 de julio.
El sindicato del Hospital Universitario de Caracas resaltó que estos hechos violan la Ley Orgánica del Trabajo, la Constitución y la Gaceta Oficial N.° 450447. Esta última detalla medidas de protección para los trabajadores de la salud frente a la emergencia de la COVID-19, especialmente personas vulnerables como adultos mayores, embarazadas y con enfermedades crónicas.
Suspensión de salarios, cestaticket, servicio funerario y entrega de medicinas a jubilados
El sindicato del HUC denunció que las autoridades del hospital pasaron este 27 de julio un listado con 388 jubilados. Estos deben presentar una fé de vida, porque, de lo contrario, quedará suspendido el pago de su jubilación, cestaticket, servicio funerario y entrega de medicinas.
“Esto es una medida violenta porque sabemos que nuestros adultos mayores que viven lejos del hospital les cuesta mucho movilizarse, otros están solos o enfermos”, resaltó Guédez y se cuestionó la razón de que no se tome en cuenta la data conectada entre el Consejo Nacional Electoral (CNE), el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) y la nómina del sector salud con el sistema Patria para hacer una limpieza de los trabajadores jubilados.
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